martes, 27 de octubre de 2020

LAUBURU ESTELA CELTA - CARPETANA

EL LAUBURU
EL LAUBURU ES UNA DE LAS ESTELA CELTAS Que los vascos han sabido preservar ya es el territorio menos romanizado. Y que el nacionalismo vasco han sabido sacarle partido y utilizarlo como icono nacionalista-identitario vasco. Pero la realidad es un símbolo pancelta que usaron en la bretaña como en Carpetania.   Estela (del griego, στήλη, stēlē; plural, στήλαι, stēlai y del latín stela; plural, stelae) es la denominación de un monumento, usualmente monolítico con inscripciones, en forma de lápida, pedestal o cipo, que se erige sobre el suelo y puede tener una función conmemorativa, funeraria, religiosa, mágico-curativa o geográfica.

En ellas se inscribían textos, signos, símbolos, y figuras, describiendo el porqué de su ubicación, constituyendo importantes documentos para arqueólogos e historiadores, apoyados por especialistas en epigrafía.

Normalmente son monolíticas, de diversos materiales pétreos y variados tamaños, pudiendo algunas alcanzar grandes dimensiones.
Las estelas conmemorativas, de carácter funerario, se erigieron desde fechas remotas, por pueblos de diversas culturas y regiones, siguiendo su uso actualmente.
En euskara Lauburu quiere decir literalmente "cuatro cabezas" (lau: cuatro, buru: cabeza). A veces se le llama también cruz vasca o esvástica vasca. Poco importa como le llamamos, lo más importante es que Lauburu era y sigue siendo uno de los principales símbolos vascos, mucho más antiguo que Ikurriña y a la vez mucho más misterioso.

¿Entonces que es Lauburu y cual es su significado?
Este signo es una esvástica bastante original. Sus brazos no son líneas sino se asemejan más bien a cuatro gotas de agua o cabezas como lo notaron los vascos. La mayoría de la gente asocia la esvástica con nazismo ignorando completamente que su historia remonta a la antigüedad profundísima, es conocida en mundo entero, en culturas diferentes que nunca tenían contacto una con otra, y que los nazis no la inventaron sino simplemente usurparon el derecho a emplearla. Lauburu tampoco se puede relacionar con una opción política a pesar de que la utilizan muchas. Hay que darse cuenta que es un signo antiguo de los vascos.

No se sabe precisamente ni como ni cuando apareció este signo en la cultura vasca. Si damos por verdadera la teoría de la llegada de antecesores de vascos actuales desde Asia, podemos pensar también que fueron ellos que tomaron consigo la esvástica de allí y la dieron este forma original. Según otra teoría, hay que buscar la génesis de Lauburu en la esvástica celta que de verdad recuerda mucho a la vasca. Como el argumento para soportar esta tesis se puede decir que entre el año 900 y 800 a. C. En los Pirineos llegan tribus celtas que podrían dejar a los vascos no solamente sus invenciones técnicas (p. ej. el arado) sino también culturales como Lauburu. Sin embargo sabemos que los celtas que vinieron a estos territorios no eran numerosos y se asimilaron bastante rápidamente con la populación vasca, entonces igual es posible que Lauburu existía mucho más antes de su llegada y que eran los vascos mismos que le crearon sin prestarlo de ninguna otra cultura.

Nada es seguro en cuanto a la aparición de Lauburu en la cultura vasca, sin embargo es segurísimo que ya los proto-vascos lo ponían en sus banderas y escudos de armas. Sabemos también que cuando las tropas romanas entraron en los territorios vascos Lauburu era empleada como pabellón de los que luchaban contra los invasores imperiales. Se ponía Lauburu también en las casas, piedras tumbales, y cosas de uso cotidiano, como por ejemplo las muebles. Pero hay que añadir que Lauburu era siempre mucho más que un símbolo heráldico, signo de pabellón o motivo decorativo y tenía significación mucho más amplia.

Lauburu es un símbolo del sol que tenía un papel importante en la cultura vasca. Los vascos saludaban al sol por la mañana después de su salida y por la tarde antes de su puesta para que no fuera triste ni enfadado Es que según sus creencias tenía una fuerza enorme, tan grande como la del Lauburu: cazaba a las almas malas, a los fantasmas y a los démonos y también era amuleto contra la magia malicia. Traía buena suerte, salud y fortuna. Simbolizaba el sol en movimiento constante, entonces también las estaciones de año, renacimiento, el poder de creación. Era un símbolo mágico y a pesar de que unos lo consideran únicamente como un signo de País Vasco, no todos olvidaron su significado primario y lo llevan como talismán.